Las secuencias formulaicas en la adquisicion de español L2
El trabajo que hemos presentado se basa en una concepción del lenguaje que considera los procesos holísticos como normativos. Los procesos analíticos son la excepción o el procedimiento marcado y serán involucrados única-mente al hacer frente a la necesidad de variación lingüística en una situación concreta. Este hecho resulta en una reducción del esfuerzo de producción y procesamiento lingüístico, así como en una flexibilidad mayor en cuanto a la expresión y comprensión del lenguaje. Entendemos como lenguaje formulaico a aquellas palabras o secuencias de palabras que muestran indicios de haber sido procesadas sin recurrir a su nivel mínimo de composición. El modelo generativista de Chomsky (1965) concedía el papel principal a los procesos analíticos y centraba su atención en el estudio de las unidades léxicas menores. Sin embargo, no podía expli-car el nexo directo entre forma y significado propio de las expresiones idio-máticas opacas, ni la causa de que ciertas combinaciones de palabras sean preferidas por los HNs. El lenguaje formulaico es afín a modelos lingüísticos socioculturales y cognitivos que tienen en consideración lo experimentado durante la interac-ción entre individuos. Dichos modelos otorgan un lugar central al contexto e incluyen unidades léxicas tanto simples como complejas de fijación diversa. Además, perciben el proceso adquisitivo como una evolución dirigida hacia una mayor flexibilidad. En el presente trabajo hemos optado por un modelo lingüístico incluyente que considera tanto unidades léxicas simples como complejas, fijas, semifi-jas o con cupos abiertos, distribuidas a lo largo de un continuo de fijación léxica y semántica, pero sin ocupar una posición fija en éste. Así, las unida-des lingüísticas pueden ser procesadas de manera diferente y ser segmenta-das o tratadas holísticamente según necesidades y situaciones concretas. El lenguaje formulaico queda determinado por su función y desempeña fundamentalmente funciones referenciales y discursivas, aunque las últimas son las más frecuentes, sobre todo si es empleado con una finalidad interac-cional. El modelo de Wray (2002) propone tres funciones fundamentales del lenguaje formulaico: reducir el esfuerzo de procesamiento, dirigir al oyente y estructurar el discurso. Estas tres funciones quedan reunidas en una función principal: promover los intereses del individuo. El hablante quiere promover sus propios intereses durante la interacción e intenta conducir al oyente a una determinada interpretación del material lingüístico. Se ha notado la existencia de diferencias individuales a la hora de ad-quirir una lengua y se ha postulado la existencia de un continuo en cuanto al modo adoptado, según el que algunos individuos, o los mismos individuos en diferentes etapas, prefieren el modo holístico o el analítico. El proceso adquisitivo está caracterizado por una gran variación originada por el diferente desarrollo de la riqueza léxica, el acierto formal y la fluidez en la actuación. En los HNNs, uno de estos tres aspectos predomina como máximo al utilizar la L2. La variación individual durante una estancia del HNN en el país donde se habla la lengua meta, que-da determinada por variables afectivas como la motivación, las actitudes hacia la L2, la ansiedad, la personalidad, la aculturación y el shock cultural, variables cognitivas como la aptitud lingüística, el estilo y las estrategias de aprendizaje, variables biográficas como el sexo, variables lingüísticas como la competencia del HNN antes de la estancia y la interacción con otros 185 HNNs, y variables circunstanciales como las actividades realizadas por los HNNs y su localización. Teniendo en cuenta lo expuesto en el resumen del marco teórico, concluimos que el lenguaje formulaico desempeña un papel fundamental en los 186 procesos lingüísticos en general y en la adquisición del lenguaje en particular, junto con la capacidad de descomponer y crear secuencias nuevas. La cantidad, la variedad y la distribución del lenguaje formulaico refleja el do-minio de la L2. Existen diferencias entre HNs y HNNs en cuanto a su uso del lenguaje formulaico, pero un periodo de residencia en el país donde se habla la lengua meta suaviza dichas diferencias. Otros factores que afectan positivamente a la utilización del lenguaje formulaico son el uso de un registro informal y la familiaridad tanto entre los interactuantes como con el tema tratado.
Nuestro trabajo tenía como objetivo principal observar el efecto de un periodo de inmersión lingüística de aproximadamente un cuatrimestre en la evolución de HNNs de español L2 con respecto a su uso de SFs en compara-ción con el uso de los HNs. En segundo lugar, queríamos ver qué efecto produce el tipo de actividad realizada en la cantidad y en la distribución de las SFs encontradas. En trabajos posteriores nos gustaría comparar la evolución en el uso de las SFs en HNNs durante su estancia en un país de habla hispana con el uso de las SFs en HNNs que sólo han sido objeto de enseñanza formal de español. También sería muy interesante correlacionar la competencia formulaica de los HNNs con otros factores de la competencia lingüística o comu-nicativa como la complejidad sintáctica, la aptitud lingüística, la fluidez en la actuación o la motivación. Por último, sería de gran interés estudiar las SFs en hablantes muy avanzados de español y las posibles aplicaciones del len-guaje formulaico en la enseñanza de E/LE, así como en la redacción de ma-terial didáctico para la enseñanza de segundas lenguas.